17 de julio de 2025

Funciona la Casa de la Tierra fuera de edificio vandalizado

Por Jesús Rivera

Reynosa, Tamaulipas.- La Casa de la Tierra de Reynosa, construida durante el gobierno de Egidio Torre Cantú con un costo de 12 millones de pesos, continúa abandonada y vandalizada.
No obstante, personal que laboraba en ese lugar hasta antes de la pandemia continúan llevando conocimientos a las escuelas y mostrando a los estudiantes el material audiovisual que les permite conocer más de nuestro planeta y su entorno físico.
En la cuenta de Facebook Casas de la Tierra, el grupo de divulgadores comentaron lo siguiente:

Llevemos la chispa de la ciencia a cada rincón de Reynosa.

En los Centros de desarrollo comunitario de Reynosa, sabemos que hay un potencial increíble esperando ser descubierto. La ciencia no es solo para los laboratorios, es una herramienta poderosa que puede transformar vidas, empoderar a nuestras comunidades y abrir puertas a un futuro más brillante.
Al llevar la ciencia a estos Centros, estamos:
-Despertando la curiosidad: Inspirando a niños y jóvenes a explorar el mundo que les rodea con una nueva perspectiva.
-Fomentando el pensamiento crítico: Brindándoles herramientas para analizar, cuestionar y encontrar soluciones a los desafíos cotidianos.
-Impulsando el desarrollo local: Equipando a las futuras generaciones con conocimientos y habilidades que pueden aplicar para mejorar su entorno y generar oportunidades.
-Preservando el conocimiento ancestral: Conectando la sabiduría tradicional con las innovaciones científicas para un desarrollo integral y sostenible.
¡Es hora de construir puentes de conocimiento! Creemos firmemente que cada niña y cada niño de #Tamaulipas merece la oportunidad de soñar en grande y de tener acceso a las herramientas que les permitan construir un futuro mejor.

Cabe mencionar que a consecuencia de tecnicismos administrativos el edificio de La Casa de la Tierra ubicado en el Parque Cultural Reynosa no ha sido rehabilitado.
El inmueble dejó de usarse en 2020, tras declararse la pandemia de COVID-19. En los siguientes años empezaron a vandalizarlo y las autoridades de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (SEDUMA) retiraron el costoso equipo que había en su interior.
En la actualidad, está solo el cascarón.